Haworthia cooperii

Oriunda de Sudáfrica, pertenece a un grupo de plantas de porte pequeño correspondientes a la familia Asphodelaceae.

Planta que forma una roseta compacta con numerosas hojas, cortas, gruesas y suculentas, de color verde grisáceo con bandas más oscuras en las puntas, finas espinas en los bordes.

 Posee una singularidad ya que sus hojas son translúcidas lo que le da un aspecto llamativo.

En exterior prefiere emplazamientos a la sombra o semi-sombra; es idónea para cultivar en interior en situaciones muy luminosas. El sol intenso estropea a esta planta.

Produce en primavera largos tallos florales de unos 40 cm de largo, que crecen de manera erguida, de color pardo y en su extremo surgen en racimos pequeñas flores tubulares, de color blanco y finas líneas oscuras a lo largo de la flor.

Requiere un sustrato rico en materia orgánica y arena para facilitar el drenaje.

 Hay que regarla de forma copiosa en verano y más reducida el resto del año.

Se multiplica por hijuelos que suelen crecer de forma natural y con profusión alrededor de la planta madre, o bien por esqueje de hoja.
Por lo general las hojas que caen sobre el sustrato por mala manipulación u otra causa, enraízan sin problemas.

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