Es una especie de magnífica planta suculenta perteneciente a la familia de las Crasuláceas. Produce una floración abundante en tonalidades amarillas o anaranjadas que contrastan con la coloración verde grisácea de las hojas.
Al verla se entiende el porqué de su nombre pilosa (peluda), ya que las hojas están cubiertas de una fina pero copiosa vellosidad blanquecina que le da a la planta un reflejo plateado.
Las hojas son carnosas, gruesas, verde grisáceas, en ocasiones e influenciadas por el efecto del sol los bordes de las hojas se vuelven rojizas.
Se deber regar de manera generosa en verano, dejándo que el sustrato llegue a casi secarse antes de regar de nuevo.
No conviene mojar las hojas debido a que los pelillos retienen el líquido y puede estropear a la planta.
Las flores brotan en los extremos de largos tallos.
Para su multiplicación se utiliza esquejes de tallo al igual que de esquejes de hoja, en ambos casos hay que dejar secar el corte durante un par de días y luego plantarlos de manera normal.
